Monday, June 6, 2011     17:19
 

Inauguración del Canal de Suez

Desde los tiempos del faraón Ramses II, los egipcios habìan pensado en excavar un canal entre el Nilo y el Mar Rojo, que luego de varios intentos poco exitosos, la idea tuvo que ser abandonada.

Los grandes hechos históricos siempre están situados dentro de un marco que va muy ligado a caprichos de la suerte o de la acasualidad. La construcciòn del Canal de Suez,no escapa a esta lìnea de conducta.

El conde Ferdinand Marie de Lesseps, nacido en Versalles en 1805, se encontraba en Alexandria,en 1832, desempeñando funciones como vicecónsul, donde llegó a establecer una muy estrecha amistad con el príncipe Mohammed Said.

Principalmente y basada en esta relaciçon, en 1854 le extendiò una particular concesión, con 99 años de duración, para que formara una compañía, cuyo propósito sería construir un canal a través del istmo egipcio y establecer la comunicación entre el Mar Mediterráneo y el lago Amargo ( Mar Rojo ).

Naciò asì la Compagnie Universelle de Canal Maritime de Suez, que vino a ser el esfuerzo y promoción extraordinaria de su genial creador,el Conde de Lesseps.

Se estableció que las ganancias serían distribuídas en un 15% para el gobierno de Egipto, un 10% para los accionistas fundadores y un 15% para los accionistas comunes. El resto se dedicaría al manejo de la empresa.

La personalidad del conde, con su gran sentido de organizaciòn y el máximo empleo de medios propagandìsticos, hizo posible que los trabajos de excavaciòn se iniciaran el 25 de abril de 1859.

Con el irrestricto apoyo del príncipe Said, con una mano de obra cautiva de 20.000 trabajadores, suministrada por el gobierno egipcio, se fueron realizando progresos bien rápidos en la gigantesca obra.

En enero de 1863, falleciò Mohammed Said y así desapareciò ese enorme apoyo, que basado en una amistad de verdad, se le habìa ofrecido en todo momento a de Lesseps.

Sin embargo, el sucesor Kedie Ishmail, aunque no se oponía a los planes de la construcciòn del canal, tampoco le brindaba la decidida y abierta cooperación que este plan necesitaba.

Variados problemas de origen interno, determinaron la intervención del emperador Napoleón III quien suspendió de inmediato la consecuciòn de trabajadores por el gobierno egipcio, a la vez ordenó devolver los 150.000 acres de terreno que eran propiedad de la compañía, desde el momento de firmado el contrato inicial. Como una medida compensatoria, se lo otorgò a la Compagnie Universelle, la suma de 84 millones de francos y se aceptó la legalidad de la concesión original.

Los trabajos se reanudaron en agosto de 1866 con solo 15.000 obreros procedentes de Francia,Italia, Arabia,Dalmacia y Siria.

El 13 de octubre de 1869, las aguas del Mediterráneo pasaron al Lago Amargo, observandose el abrazo de dos mares.

El cansal de Suez tiene una longitud de 100 millas ( 16 kms), el ancho mínimo en el fondo es de 60 metros ( 197 pies). La mayor parte del canal es de una vía, existiendo algunos lugares para un tránsito doble.

Un ferrocarril en el lado oeste de la vía marítima, va paralela al canal en toda su extensión.

El 30 de septiembre de 1869 se anuncia desde Egipto que se habìan retirado las comuertas que cerraban el paso de las aguas hacia el Lago Amargo. El conde de Lesseps hizo el cruce de Port Said ( llamado así en honor de su gran amigo ) hasta Port Suez en unas 15 horas.

La inauguración del canal se llevó a cabo el 17 de noviembre de 1869, con un esplèndido programa que enmarcaba a una grandiosa fiesta y una profusión de personalidades de todo el mundo.

La invitada especial era la emperatriz Eugenia,esposa del emperador Napoleón III de Francia, estando presente tambien el emperador de Austria, el príncipe de Gales y el principe heredero de Austria, entre las principales testas coronadas que se dieron cita ante tan importante evento.

En la mañana de la fecha inaugural, miles de personas esperaban en ambas orillas del canal, para observar el paso de los grandes navíos que traían a los huéspedes.

La parada naval iba precedida por el yate imperial L’Aigle con la emperatriz Eugenia a la cabeza y más de 6000 invitados, a los cuales se le pagaron todos los gastos, tal era la fastuosidad y estilo de magnificencia del conde de Lesseps.

Es importante destacar que se construyó especialmente un teatro para la representaciòn de la ópera AIDA, cuya composición se le habìa solicitado a Guiseppe Verdi, pero por variadas razones no llegó a tener su premiere mundial sino dos años más tarde, verdad histórica que desmiente la errònea idea que dicha ópera se presentò en forma simultánea con las festividades inaugurales.

Sobre Ferdinand de Lesseps llovieron toda clase de halagosy honores, igual que condecoraciones.

Con las espléndidas fiestas de la apertura del Canal de Suez, también se incluyó la inauguraciòn de una nueva ciudad en la mitad de la ruta del canal y sobre la orilla izquierda, que se bautizó como ISHMAILIA.

El héroe de Suez, añadió un lauro más a su corona, al casarse en noviembre de 1871, en segundas nupcias, con una bellìsima joven francesa de 20 años, Louise Helena Aubard de Bragade, con quien tuvo una descendencia de 12 hijos ( 6 hombres y 6 mujeres ), increíble proeza para un hombre que frisaba entonces en los 66 años.

La presencia triunfal del conde de Lesseps, para quien se dijo que “ su vida mirada en retrospecto, se destaca como la màs extraordinaria del siglo XIX, aún sin la aventura de Panamá”.

De Lesseps es el canal de Suez propiamente dicho y fue la fuerza motora e inspiradora, el empresario y promotor sin paralelo, cuyo dinamismo, inteligencia y capacidad propagandística, única en su clase y género, que pudo llevar a cabo esta gran obra.